Chabán salió libre. Maria Julia salió libre. Un pollo salió con fritas (?). Ahora todo tiene sentido, las cosas me cierran [aparte del culo eh (?)]. Ya lo decía León:
"Busquenmé, me encontrarán en el país de la libertad"
Pasa que acá se lo toman todo muy a pecho, ya desde bebés (?).
El jueves pasado este no, el otro, comenzó mi carrera artística, así que vayan tomando nota. Resulta que íbamos con Fede, el de los puntos suspensivos (?), para gimnasia y en Rivadavia y José María Moreno nos para el móvil de Crónicas picantes, el programa de Cabak y Beto Casella ese donde para excitar al público masculino van peteras y toman helado (introduzca acá ese simbolito que tanto le cabe, el que indica fruta, pero en este caso aplíquelo en otra de sus funciones: la de "uhm?") (bah, lo pongo yo) (mejor no) (bueh, sí) (?). La cosa era contar un chiste en vivo, competir con otros dos y el que ganaba se llevaba entradas para ir a ver el número de Gioia "30 gracias, muchos años". Tonce Fede contó ese que Gonz dejó una vez en los comments, yo conté uno que me afané del blog del Toro (Hightoro) y después una vieja que no sé si contó un chiste o agonizó frente a la cámara, pero la cosa es que ganó y por las dudas yo me llevé entradas consuelo, que luego no usaríamos por razones extraoficiales [tábamos medio mal por lo de Ameli y Tuzzio (?)].
Si alguien lo vio, hable ahora o calle para siempre. Que grosso que alguno haga caso y no pronuncie sonido por el resto de su vida, se haga autista y viva en las hamacas hasta que un día un pendejo le ponga un tablazo entre ceja y ceja, se tenga que comer 25 puntos más pérdida de masa encefalica y recién ahí se deje de joder. Claro, es divertido hasta que pasa algo, ¿Eh? (?).